Si estás pensando en comprar una casa en Madrid, te interesa leer este artículo donde te doy unos consejos útiles a tener en cuenta para realizar con éxito una de las de las inversiones más importantes de tu vida.
Comprar una vivienda supone una importante decisión ya que formará parte fundamental de nuestras vidas.
Nuestro hogar es una parte de nosotros mismos y debemos hacer bien las cosas antes de comprar nuestra casa para no arrepentirnos.
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Lo primero que debemos conocer es nuestra cualificación financiera. Lo más fácil es acudir a nuestro banco de referencia para que analicen nuestra situación y nos informen de las opciones en función de la vivienda que vayamos a comprar.
Siempre es aconsejable que el precio de la vivienda no supere la suma entre el importe de la hipoteca más los ahorros que se vayan a destinar para la compra de la vivienda.
Esto que parece obvio a veces no se tiene en cuenta por algunos compradores que se dejan llevar por la ilusión cuando encuentran un piso que cumple todas sus expectativas.
Es recomendable que cuando se compra una casa el importe de la cuota mensual no supere el 30% de los ingresos netos mensuales de la unidad familiar.
Actualmente los bancos están ofreciendo hipotecas que pueden financiar hasta el 80% del valor de la vivienda. Es decir, hay que tener ahorrado previamente el 20% restante.
Además, hay que tener en cuenta que la compra de una vivienda conlleva unos gastos adicionales cercanos al 10% del precio de venta del inmueble.
En este aspecto, conviene mantener la hipoteca dentro de unos límites adecuados con nuestra capacidad de reembolso del préstamo, así nos resultará más fácil pagarla.
Una vez sabido cual es nuestro presupuesto de compra ya podemos empezar a buscar nuestra casa eligiendo las zonas en las que nos gustaría vivir.
Madrid tiene muchos barrios y zonas excelentes para vivir, en este sentido, es importante tener en cuenta algunos aspectos relevantes para acertar con nuestra elección.
A la hora de elegir una zona para vivir es indudable que intervienen factores emocionales (cercanía a nuestros familiares y amigos, el barrio donde hemos crecido) y factores objetivos (precios de la zona, transportes, colegios, aparcamiento, zonas verdes, comercios, ocio y servicios sanitarios).
En la balanza habrá que poner todos estos importantes factores para valorar donde comprar nuestra casa en Madrid.
Además, la ubicación es clave a la hora de comprar una vivienda ya que será determinante para mantener siempre al alza nuestra inversión por si en un futuro queremos vender nuestra casa.
Una vez elegida la ubicación, lo siguiente es definir la tipología de la vivienda que necesitamos: número de dormitorios, con o sin garaje, altura, orientación preferida y condiciones de habitabilidad determinadas.
También es importante decidir entre comprar una vivienda nueva o usada.
La vivienda nueva no precisa reformas, en cambio la de segunda mano en la mayoría de los casos si requerirá una actualización.
Las promociones de vivienda nueva con zonas comunes como jardines o piscina suponen mayores gastos de comunidad, aunque tienen la ventaja de que no suele haber riesgo de derramas imprevistas.
Si optamos por comprar una vivienda usada es muy recomendable consultar con el administrador de la comunidad el estado del inmueble y las posibles deudas o cargas existentes.
La compra de una vivienda nueva o de primera mano está sujeta al pago del IVA, un 10% del importe escriturado si es vivienda libre o un 4% si es de protección oficial.
En el caso de una adquisición de segunda mano no hay que pagar el IVA, pero sí el Impuesto de Transmisiones Patrimoniales (ITP), cuyo porcentaje en la Comunidad de Madrid es del 6% del importe escriturado.
Antes de decidirnos por una casa, es muy importante visitar la zona y analizar el vecindario.
Además, es recomendable hablar con los vecinos para conocer las ventajas e inconvenientes de vivir en esa comunidad.
Visitar la zona es imprescindible para saber si esta se ajusta a nuestras necesidades respecto al transporte público, colegios, centros médicos, comercios, zonas verdes y demás servicios relevantes.
Respecto a la vivienda es importante conocer las condiciones en las que se encuentra.
Si es de segunda mano hay que comprobar el estado de las cañerías, los cierres, las instalaciones, los suministros, las ventanas, pintura, suelos, paredes y techos.
El análisis de todos estos elementos según su estado, determinará el importe de posibles reformas y así conoceremos si el precio de la vivienda es el adecuado.
Escuchar en silencio los ruidos que puedan venir de la calle o de los edificios colindantes nos indicará si el aislamiento es adecuado.
Lo mejor, sin duda, es ser muy minucioso y observar con detenimiento hasta los sitios menos visibles.
También es importante cuando se visita la vivienda prestar atención a la orientación de la misma. La mejor orientación durante todas las épocas del año es la este-sureste.
Por último y para evitar sorpresas conviene darse una vuelta por el barrio de noche y en horas punta, para comprobar si hay exceso de tráfico, de ruidos, si es una zona tranquila o si existen establecimientos que puedan resultar molestos.
Para evitar sustos de última hora siempre es recomendable tener claro que los aspectos legales involucrados en la compra de nuestra casa se cumplen correctamente.
Si la vivienda que vamos a comprar es de segunda mano, es importante revisar antes la siguiente documentación:
Si optamos por comprar una vivienda en promoción, la comunidad de propietarios se constituye una vez se entreguen las viviendas y en el Registro de la Propiedad aparece solo la finca matriz, sin identificar cada una de las viviendas ya que el promotor todavía no ha realizado la división horizontal.
En este sentido es importante conocer la siguiente información:
La compra de nuestra casa es una decisión transcendental que conlleva realizar seguramente la inversión más importante de nuestra vida.
Es una tarea que requiere dedicar bastante tiempo y un gran esfuerzo para asegurarnos de que nuestra elección sea la mejor.
Muchas personas deciden buscar vivienda por su cuenta y aventurarse en la compra de su casa sin ningún tipo de asesoramiento externo.
Lo que en un principio puede parecer un ahorro económico, puede convertirse en futuros quebraderos de cabeza y malas decisiones.
Lo más aconsejable es contar con la ayuda de un personal shopper inmobiliario en Madrid para que nos represente y nos aconseje durante el proceso de compra, además se ahorra tiempo y dinero.
Por otro lado, cuenta con experiencia y conocimiento dentro del mercado inmobiliario y está capacitado para realizar todos los procedimientos con el objetivo de garantizar que la operación sea exitosa.
Si el comprador decide hacerlo por su cuenta tendrá que encargarse de todo el proceso y deberá ser consciente que posiblemente el vendedor sí esté representado por un asesor inmobiliario.
Si necesitas comprar tu casa en Madrid, llámame, estaré encantado de atenderte.
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